Entonces les abrió la mente para que comprendieran las Escrituras,
Lucas 24:45 (LBLA)
En los días 7 y 8 de nuestros devocionales pudimos ver como Jesús se aparece como un caminante mas a los dos discípulos que salían de Jerusalén y como ellos transformados de esa conversación, regresan a reunirse con los apóstoles y a contarles que el Maestro había resucitado. En eso se aparece Jesús dando pruebas de que esta vivo y en ese momento Lucas hace una de las declaraciones mas sorprendente al dejar constancia de que en ese instante Cristo “les abrió el entendimiento para que comprendiesen las Escrituras” (Lucas 24:45).
La palabra Griega traducida “abrió” es “dianoigo.” Significa “abrir completamente” (Strong). “Dianoigo” es la misma palabra Griega que se usa en Hechos 16:14 para describir la conversión de Lidia,
Y estaba escuchando cierta mujer llamada Lidia, de la ciudad de Tiatira, vendedora de telas de púrpura, que adoraba a Dios; y el Señor abrió su corazón para que recibiera lo que Pablo decía.
Hechos 16:14 (LBLA)
Solo cuando hay una mente abierta existe la posibilidad de comprensión, entendimiento y aún de salvación.
A pesar de que los discípulos habían caminado con Jesús por los últimos años, de todos los milagros y señales que habían sido testigos y que confirmaban quien era Jesús, esto no fue suficiente para que pudieran comprender el plan de Dios. El problema: su mente se encontraba en una caja, estaba cerrada y sus ojos cubiertos. El apóstol Pablo hace una excelente explicación de esto, al escribirle a los Corintios lo siguiente:
14 Pero la mente de ellos se endureció y, hasta el día de hoy, cada vez que se lee el antiguo pacto, el mismo velo les cubre la mente para que no puedan entender la verdad. Este velo puede quitarse solamente al creer en Cristo. 15 Efectivamente, incluso hoy en día, cuando leen los escritos de Moisés, tienen el corazón cubierto con ese velo y no comprenden.
2 Corintios 3:14-15
¿Te haz encontrado con personas con las que estas hablando de algún tema y terminan entiendo algo completamente diferente? Como ministro me toca pasar mucho de mi tiempo escuchando a miembros de mi congregación ó personas que nos visitan, y me hablan de sus problemas y necesidades. Lo interesante es cuando me toca dar un comentario al respeto del problema que la persona este viviendo resulta muy obvio cuando la persona frente a mi esta abierta a escuchar, pero también cuando no lo esta y todo termina como un monologo donde solo una persona hablo. Esto no es verdadera comunicación que transforma.
Cuando somos son abiertos en nuestra forma de pensar y corazones estaremos dispuestos a escuchar puntos de vista diferentes a los nuestros. Pero cuando somos cerrados, no importa si las pruebas ó conocimientos que nos compartan puedan salvar nuestras vidas, mientras que tengamos un velo que nos cubra la cara no podremos ser capaces de ver nuestra propia necesidad de un cambio. En lugar de preguntar, siempre argumentaremos, en lugar de escuchar estaremos listos para responder.
Esto me deja algunas lecciones interesantes:
- Podemos escuchar el evangelio, aun de los propios labios de Cristo y aún así no comprender su significado.
- Ningún milagro, ni oración contestada puede fortalecer nuestra fe sino tenemos una mente abierta por el Señor.
- Podemos caminar junto a Cristo todos los días sin comprender su mensaje realmente.
- Puedes conocer muchas escrituras y ser fiel en tu congregación pero permanecer con una mente cerrada.
- Puedes hacer grandes obras por Dios y aun así no haberlas hecho entendiendo a tu Señor ni su propósito.
Es importante recordar que esto fue parte de un proceso que inicio cuando los discípulos decidieron seguir a este joven de Galilea, que continuo cuando lo escucharon predicar y vieron su ejemplo y que por tres años convivieron con Él, pero esto no paro ahí, todos fallaron y todos fueron amados y que este momento en especifico fue el resultado de la búsqueda del Maestro primero a dos caminantes y que siguió con la visita en un hogar lleno de miedo.
Después de estudiar cada una de estas escrituras me doy cuenta de como Dios sigue trabajando en mi vida como en la tuya. Y que las bendiciones como las pruebas mas duras son tan solo caras de la misma moneda. Que los momentos de duda como los de certeza, ó cuando tenemos una mente cerrada y religiosa, puede traducirse en la oportunidad de que podamos experimentar el poder de una mente abierta y que nos ayude a comprende el plan de Dios de forma más personal e intima.
Para mi esto fue el momento que he comentado en otros posts. Cuando deje de ser un ministro por un tiempo. No comprendía por que Dios permitía esto. El enojo, la amargura y el desanimo eran parte del pan que comía en muchos momentos. Esto me lleva de nuevo a reflexionar en las palabras de Pablo, cuando explicaba el problema de los judíos que no lograban entender el evangelio de Cristo, como le estaba pasando a los discipulos.
16 En cambio, cuando alguien se vuelve al Señor, el velo es quitado. 17 Pues el Señor es el Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad. 18 Así que, todos nosotros, a quienes nos ha sido quitado el velo, podemos ver y reflejar la gloria del Señor. El Señor, quien es el Espíritu, nos hace más y más parecidos a él a medida que somos transformados a su gloriosa imagen.
2 Corintios 3:16-18
Algunos importantes comentaristas y estudiosos bíblicos han declarado que el momento donde Jesús les abre el entendimiento a los discípulos fue el momento que también fueron realmente convertidos.
Como todo buen judío los discípulos tenían sobre sus hombros todas las costumbres, mandatos, reglas, sacrificios y demás demandas de la ley religiosa de su tiempo. Además de una idea muy clara del Mesías que habría de venir. Uno que parecía mas un conquistador que establecería su reino físico entre su pueblo y los liberaría de la tiranía de las naciones extranjeras.
Solo una persona que pudiera leer las escrituras desde una mentalidad abierta podría encontrar en Jesús el enviado de Dios; pero si alguien caminaba con el velo de la ley cubriendo sus ojos el resultado seria que miraríamos a Jesus como una amenaza que debe ser neutralizada o destruida.
Como alguien que decidió seguir a Jesús desde los 8 años y que fue bautizado a los 17 años, y que dejo su carrera universitaria para convertirse en ministro y misionero desde los 21, puedo decir que he pasado la mayoría de mi vida buscando servir al Señor. Pero en mi caminar en el evangelio he tenido la mente cerrada, he visto la vida y a los demás detrás de un velo llamado, costumbres, doctrina, mi iglesia etc.
Un buen día en aquel año que dejamos de ser ministros pagados por nuestra iglesia mi esposa y yo; y cuando ya el dinero que nos quedaba se estaba acabando ya que aún yo no conseguía trabajo; mi esposa y yo decidimos vender cosas en la calle para poder comer y tener dinero para continuar la búsqueda de empleo. Y recuerdo vívidamente a mi hijo de tres años en ese entonces ayudándonos a vender lápices en la calle por un peso (mexicano).
Ese momento y otros más me abrieron la mente y me liberaron. Por que me quitaron la venda de la religiosidad que pudiera tener y así poder mirar la vida de una forma más compasiva.
Pude comprender que donde esta el espíritu de Dios ahí hay libertad. Como ministro muchas veces tuve que luchar con la culpa de no hacer lo suficiente y de no ser suficiente, pero Dios me estaba ayudando a vivir en una libertad donde el Señor me mostraría que Él es fiel todo el tiempo y Su amor no tiene fin y que solo Él es suficiente.
El verso 18 de esta escritura en Corintios nos recuerda que «…a quienes nos ha sido quitado el velo, podemos ver y reflejar la gloria del Señor.» Como nunca en mi vida pude ver al Señor amándome, supliendo mis necesidades y siendo Él mi mayor deseo. Ya no había un titulo, ni un salario, ni reconocimiento; y esto dio lugar para volver a mirar a mi Dios en todo su esplendor.
Los discípulos tuvieron que pasar por todo lo que pasaron para que por medio de las escrituras y pasando tiempo con Jesús por fin comprendieran que Él tenia que morir y resucitar.
Este fue un momento de conversión para mi: Dejar de depender de la ley, de las costumbres y de la gente a mi alrededor para hacer lo que Dios me pide hacer.
Hoy por hoy Dios permitió que volviera al ministerio de tiempo completo, pero ahora con la gran enseñanza de que la cruz y la tumba en mi vida es tan solo el preámbulo para mirar en todo su esplendor la resurrección y me permita abrir mi mente para comprender realmente su mensaje.
Es mi oración que también lo haga contigo.
Bendiciones.
Buen dia Alberto muchas gracias por la clase…
me anima mucho , me transporta en estos momentos mas aun pensan que no estas en vivo que podemos estar todos juntos escuchandote todos cubriendo dando lo necesario a cada uno..
cuando compartes cosas tan personales de situaciones y dificiles de tu vida y escuchar esa pasion al decir he ahi en ese momento cuando mas veo cuando mas coprendo su amor.. me cuativa.. mas el devocional
un abrazo…
hay mucha tarea por hacer con todo lo que he recivido de estos devocionales..
sakudos y excelente fin de semana
Muchas gracias ☺️
Sent from my iPhone
>
Gracias por tan bendecida refleccion y por compartir tu experiencia- me gustaria oir (leer0 mas de esa experiencia y cuanto duro ese peregrinaje. Dios te bendiga y estare pendiente para leer mas de lo que Dios esta hacienda en tu vida, esposa, familia y ministerio.